Este evento es uno de los más curiosos, bizarros y estrambótico que hay en la faz en el mundo. El “Hadaka Matsuri” se celebra cada año en el templo de Saidaji Kannon-in, en la ciudad de Okayama. Es uno de los festivales más antiguos de Japón, tiene más de 500 años. Pónganse en situación, este evento se lleva haciendo desde, aproximadamente el 1500 d.C. Los festivales desnudos en Japón, se llevan a cabo en docenas de lugares en todo Japón cada año, generalmente en verano o invierno. El procedimiento empieza con un sacerdote lanzando un artefacto de madera, que funciona como los antiguos talismanes, desde una ventana a una altura de cuatro metros. En procedimiento es muy complicado, y se entremezclan un sin fin de hombres jóvenes, mayores, luchadores profesionales de sumo, y los yakuza (mafia japonesa), reconocidos por llevar el fundoshi en color negro en vez de blanco. Cada uno de los participantes debe preparar papeles con su nombre, tipo de sangre y número de emergencia y guardarlo de antemano bajo su vestimenta. Las peleas están prohibidas: aunque a veces la actitud ansiosa de los participantes rompe esta norma. No se puede beber aunque previamente al evento, el consumo de alcohol aumenta por la celebración de este evento.

El festival se basa en recoger unos palos sagrados llamados “shingi”, compitiendo entre unas 10.000 personas. La multitud puede esperar más de una hora para poder coger los shingi. Los ganadores se consideran los “fukuotoko”, hombres afortunados. El Hadaka Matsuri se celebra cada año, el tercer sábado de febrero. Se dice que este día es uno de los mas fríos de el año. La mayoría de estas tradiciones siguen siendo solamente de hombres. En el evento tan sólo un fundoshi se coloca a modo de calzón sobre los glúteos y genitales de los asistentes. Las mujeres no están invitadas a esta celebración que, aunque tiene lugar en varias localidades niponas, cobra su máxima expresión en el Templo Saidaiji de la ciudad de Okayama.